
La reunión de Lima tenia como finalidad discutir cuáles son las responsabilidades que el mundo necesita tomar antes los grandes desafíos que enfrenta el planeta. No sólo en relación con el clima, sino también los impactos des la globalización y la interdependencia entre los países.
El evento fue diseñado para consolidar y divulgar el documento “Manifiesto de Lima a Paris”. Por eso, se llevó a cabo un diálogo entre los representantes de los países de América Latina, los funcionarios del Estado, parlamentarios andinos y líderes de la sociedad civil. El programa incluyó una diversidad de actores como se había previsto inicialmente, y de acuerdo a la multidimensionalidad del problema de la responsabilidad para el cambio climático.
Este documento es una advertencia contundente, un llamado a los gobiernos sobre la necesidad de desarrollar un acuerdo internacional para que los países abren su nacionalismo extremo a favor de un acuerdo efectivo que va más allá del clima. La idea es establecer nuevas formas de gobernanza ambiental que tendrán la corresponsabilidades como base ética. El objetivo principal es la adopción de una Declaración Universal de la Responsabilidades Humanas complementaria a la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
El Foro de Ética y Responsabilidades (FER) presentó en Río+20, en 2012, una primera versión de esta propuesta, exigiendo que los países miembros de la ONU asumen sus responsabilidades antes de la crisis socio-ambiental en respuesta a era de los límites en la que vivimos.
La propuesta para un acuerdo climático global de FER, se entregó formalmente al representante del Estado peruano, organizador de la Cumbre COP 20. Este manifestó lanzado en Lima por FER está abierto para consulta pública para recibir colaboraciones y adhesiones y así iniciar un proceso hacia COP21 en París en 2015. Con él también se lanzó la propuesta de realizar una Asamblea Mundial de Ciudadanos antes COP21. Este último debe ser un proceso participativo que dependerá de la participación de los gobiernos locales y la movilización de todos los sectores de la sociedad.
El Foro de Ética y Responsabilidades se formó allí más de 10 años y tiene “responsabilidad” como tema central. La iniciativa de esta reunión fue coordinada por Ricardo Jiménez, sociólogo chileno e Isis de Palma, educomunicadora brasileña, ambos miembros del FER. La reunión también fue posible gracias a una alianza con el deputado andino Alberto Adiranzén quien ofreció la habitación en la Comunidad Andina. Fue la única actividad organizada por la sociedad civil, celebrada en la Comunidad Andina - CAN en Lima. Todos los demás eran sólo de los estados.

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